INSTITUTO DE LAS MUJERES DEL DISTRITO FEDERAL
CENTRO DE DOCUMENTACIÓN
BOLETÍN DEL MES DE OCTUBRE DE 2015
COLECCIÓN DOCUMENTAL DRA. OLGA BUSTOS ROMERO
Clasificación:305.42,M3
Antología
del feminismo Martín-Gamero,
Amalia, [comp.]
Serie:El Libro de bolsillo. Sección Literatura ; 570
Presenta, desde el siglo XVII hasta 1920, algunos testimonios que las mujeres han dejado de su lucha por mejorar su condición política, socioeconómica y educativa, en todo el mundo. Ordenado cronológicamente. Incluye un capítulo dedicado a los escritos de hombres que defendieron a la mujer.
Presenta, desde el siglo XVII hasta 1920, algunos testimonios que las mujeres han dejado de su lucha por mejorar su condición política, socioeconómica y educativa, en todo el mundo. Ordenado cronológicamente. Incluye un capítulo dedicado a los escritos de hombres que defendieron a la mujer.
Clasificación:CDOBR,305.42,B38
El segundo sexo Notas:V.1. Los hechos
y los mitos. -- V.2. La experiencia vivida
Beauvoir, Simone de
La situación de la mujer en los diferentes grupos sociales se ha venido modificando en el transcurso de los siglos. Las mejores conquistas han sido casi siempre de corte jurídico sin que los actos concretos las refrendaran. De ese modo se ha planteado una situación paradójica: los más altos espíritus han proclamado la necesidad de otorgar a la mujer derechos iguales a los de los hombres, y poco a poco esas exigencias espirituales han adoptado formas jurídicas reales, pero de hecho, y esto es lo que importa, la mujer ha visto desconocida esa igualdad. La tradición, la inercia y el egoísmo de los hombres por un lado, y la autocomplacencia, indiferencia y resignación de las mujeres por el otro, han sido los motores fundamentales de ese hecho.
Beauvoir, Simone de
La situación de la mujer en los diferentes grupos sociales se ha venido modificando en el transcurso de los siglos. Las mejores conquistas han sido casi siempre de corte jurídico sin que los actos concretos las refrendaran. De ese modo se ha planteado una situación paradójica: los más altos espíritus han proclamado la necesidad de otorgar a la mujer derechos iguales a los de los hombres, y poco a poco esas exigencias espirituales han adoptado formas jurídicas reales, pero de hecho, y esto es lo que importa, la mujer ha visto desconocida esa igualdad. La tradición, la inercia y el egoísmo de los hombres por un lado, y la autocomplacencia, indiferencia y resignación de las mujeres por el otro, han sido los motores fundamentales de ese hecho.