CEDOC

La razón de ser del CEDOC es posibilitar el trabajo al interior del Instituto, de las Dependencias del Gobierno de la Ciudad, Instituciones Académicas y de personas interesadas en temas de género.

Su principal papel es educativo, ya que en él se encuentra el arribo al conocimiento; sin embargo, también puede ser transformador, en función a que las investigaciones y reflexiones que de él surjan, motiven a generar cambios sociales estructurales.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Marzo de 2012

INSTITUTO DE LAS MUJERES DEL DISTRITO FEDERAL
CENTRO DE DOCUMENTACIÓN
BOLETÍN DEL MES DE MARZO DE 2012


Clasificación : 158, H47
Las constelaciones familiares al servicio de la salud pública
Los consultantes de este taller fueron ciudadanos olvidados por las leyes y por la salud pública. Mujeres que muy jóvenes fueron emigrantes rurales, que llegaron a la ciudad con la ilusión de construir una mejor vida y que fueron violadas en sus cuerpos y en sus sueños por los personajes de la gran urbe; hombres que cotidianamente están al volante, asumiendo la responsabilidad de transportar al pasaje público y no pueden controlar su agresión heredada de la infancia de otros; mujeres que criaron a sus hijos solas; jóvenes que desde pequeños huyeron de sus hogares sintiéndose más seguros en la calle que en su casa.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Febrero de 2012

INSTITUTO DE LAS MUJERES DEL DISTRITO FEDERAL
CENTRO DE DOCUMENTACIÓN
BOLETÍN DEL MES DE FEBRERO DE 2012



Clasificación : 302.23, H55
La prensa femenina en México durante el siglo XIX
Varias historiadoras, como Carmen Ramos y Francisca Carner, coinciden en afirmar que los prototipos femeninos que la sociedad mexicana ofrecía a mediados del siglo XIX eran : monjas devotas, amas de casa impecables, hijas, esposas y madres dóciles. Poco a poco se fueron integrando a diversas actividades fuera del hogar, en las fábricas textiles, el comercio, las oficinas, otras más se dedicaron a la docencia y algunas se interesaron por las artes, pintoras y escritoras empiezan a surgir en el siglo XIX. Estas últimas comienzan a hacer su aparición en los círculos literarios de aquellos años para después insertar sus obras en diversas publicaciones. Es así como se van integrando primero como colaboradoras y más tarde como creadoras de sus propias publicaciones que se integrarían a los cientos de títulos de periódicos que ya circulaban durante el siglo XIX.